Los políticos prometen a la gente cosas de este mundo; los líderes religiosos prometen cosas del otro mundo.
“Ni el líder religioso ni el político está interesado en las
personas que ellos pretenden liderar. Ellos están interesados en ser líderes, y
por supuesto el líder no puede existir sin aquellos que él lidera, así que es
una necesidad el ir prometiendo cosas a la gente. Los políticos prometen a la
gente cosas de este mundo; los líderes religiosos prometen cosas del otro
mundo. Pero, ¿ves tú alguna diferencia en lo que están haciendo? Ambos van
prometiendo para que tú los vayas siguiendo, temeroso de perderte en alguna
parte, porque si pierdes el camino entonces perderás también lo prometido.
Lo prometido te mantiene con la multitud, y las promesas no
cuestan nada. Tú puedes prometer cualquier cosa. Las promesas son siempre para
mañana, y el mañana nunca llega".
Osho, From
Darkness to Light